CINCO ACTITUDES FRENTE A LA VIDA...

Marcos 4:35-41

 Propósito específico:
Enseñar que cambiar la actitud enriquece la vida.

 Oración de transición: Veamos 5 actitudes que mejoran nuestra vida como cristianos.

 1.- ACTITUD DE FIRMEZA. Nos van a ocurrir cosas inesperadas en la vida (Vs37) Dice que "de repente" se desató la tempestad. Nada hacía presagiar dicho acontecimiento. Pero sucedió. Debemos estar preparados para los "de repente" de la vida. No siempre esa tempestad vendrá desde afuera... muchas veces la encontraremos dentro nuestro. Tentaciones, desalientos, rebelión, derrota, etc.

 2.- ACTITUD DE CONFIANZA EN DIOS. No siempre los que nos rodean podrán ayudarnos. Tendremos que atravesar solos las dificultades. Ni Pedro (avezado hombre de mar) pudo ayudar a Juan. Ni Andrés pudo serle útil a Jacobo. Muchas veces tendremos que atravesar solos nuestras "tempestades".

 3.- ACTITUD DE OBEDIENCIA. Deberemos estar preparados para cuando "Dios hace silencio". (Vs38) En este caso Jesús dormía.

 4.- ACTITUD DE FE. Confiar que a pesar de todo Jesús está "en la barca"... El tiene todo bajo control. 

5.- ACTITUD DE ADORACIÓN. Nunca dudar en cuanto a los propósitos de Dios para con nuestras vidas. Dice que de una orilla pasaron a la otra (Vs35) El propósito en aquella oportunidad era llegar al otro lado. Pasar a la otra orilla. Significa que el propósito de Dios habrá de cumplirse aún a pesar de las tempestades que nos puedan ocurrir.

 Conclusión: Abierta.

 Oremos

 Pr. Raúl Flores. Predica Domingo 29 de Abril 2012 Comunidad Cristiana Nueva Vida.

SOLO SE TRATA DE... ACTITUD

Deuteronomio 30:19

 “A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia” . Es como si Dios les dijera: “Les he puesto dos actitudes para que escojan: Actitud de bendición o de maldición, elijan con que actitud piensan vivir.

Propósito específico:
 Enseñar que podemos mejorar nuestra vida mejorando la actitud. La mala actitud es lo primero que necesitamos cambiar. Alguien dijo con razón que la actitud es lo más poderoso que tenemos.Tu actitud puede levantarte y abrirte puertas, o puede derribarte y cerrártelas. Como Comunidad decidamos -cada uno- mejorar cada día nuestra actitud.


Mensaje:

Intro:
¿Qué cosa es actitud? Por actitud queremos decir “manera de reaccionar”. Postura, reacción que se tiene ante lo que nos pasa. Tenemos actitudes frente al trabajo, frente a la gente, frente a Dios, frente a los problemas. Todos reaccionamos de alguna manera. Eso se llama actitud. Alguien dijo una vez con mucha razón que: "La vida es 10% situaciones y 90% de actitud frente a ellas". ¿Qué verdad no?

O.T: En esta mañana quiero enumerar 5 actitudes que deberíamos permanentemente escoger para vivir dignamente y en la voluntad de Dios.

 1.- La actitud de Crecer. Jirogo Kano fue el fundador del judo en Japón. Y poco antes de morir dijo: “Cuando me entierren quiero que me coloquen el cinturón blanco”. El cinturón blanco en judo es para el que recién se inicia. Esta es una actitud de crecimiento. ¿Qué diferente a nosotros no? Solemos conseguir “algún” logro espiritual y ya queremos usar cinturón negro. Ya no oramos como antes... Ya no leemos asiduamente la Palabra. Ya no congregamos como soliamos... Y es que si no crecemos, si no tenemos ganas de buscar a Dios, si no tenemos actitud de ser discipulado y de servir, estamos anunciando nuestra muerte espiritual. Crecimiento viene con actitud. Que en esta mañana nos nazca decir: “Quiero crecer más Señor, quiero más de Ti, tengo hambre de Ti. Señor quiero crecer y buscarte cada vez más”.

2.- La actitud de mirar con los ojos de Dios. Dice que cuando David entró en la cueva donde estaba Saúl, le cortó el manto y no lo mató. ¿por qué no lo mató? La razón era esta: “Yo no voy a tocar al ungido de Dios”. Humanamente, ¿Saúl era el ungido de Dios? no. Espiritualmente, ¿Saúl era el ungido de Dios? si, porque Dios lo había llamado. Que nos dice eso? Que David tenía el corazón de Dios porque veía conforme como veía Dios. Tu problema va a cambiar cuando cambies de actitud. No porque tu problema cambie, sino porque tu ojo verá las cosas de otra manera. Que en esta mañana podamos decir: “Señor, dame tus ojos para ver este problema como vos lo ves”. Dicen que estaba el profeta y lo habían rodeado los enemigos, y el siervo se había desesperado. El profeta dijo: “Señor, abre sus ojos para que vea”. Esa es la clave... ver... Esa es la actitud. Ver y ver con los ojos de Dios. Aleluya... Y que pasó?: El siervo vio ángeles y dijo: “Son más los nuestros que los enemigos”. Leí de un predicador que decía que “Cuando ves con los ojos de Dios vas a ver un cartel grande que dice: Éxito, bendición, prosperidad al final de ese problema porque es tu herencia” ¿Qué verdad no?

3.- La actirud del corazón abierto al Espíritu. Mucha gente no se congrega porque ha sido lastimada. “A mí me lastimó el pastor, mi ex-marido, un líder, mi familia”. El problema no es el que te lastimó, el problema es que no tuviste una actitud de sabiduría. Si entregás el control de tu corazón a la persona equivocada, tu vida va a ser lastimada continuamente. Nunca tendrás paz. Sólo el Señor es el que debe reinar en tu corazón. Dios le dijo a Salomón: “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón”. El centro donde manejás tu vida es tu corazón y el único que tiene que entrar a ese lugar es el Señor. Hay Evangélicos que ponen a los pastores al mismo nivel del Espíritu Santo. Falso. No es así. El mensaje hoy es: “No abras demasiado tu corazón a las personas”. La puerta íntima de tu corazón es para el Espíritu Santo, y Él sabrá a quien deja entrar y a quién le debes cerrar la puerta.

4.- La actitud del guerrero. Se cuenta que una vez Churchill fue a dar una conferencia en medio de la 2º Guerra Mundial a estudiantes universitarios. Se sacó el sombrero, se paró allí, y dijo: “Nunca, nunca te rindas”. Voy a repetir mi discurso: “Nunca, nunca te rindas” se puso el sombrero nuevamente y se fue. La gente que estuvo allí nunca más se olvidó de aquél breve discurso. Y hoy el Señor te dice a vos también: “Nunca te rindas”. Esfuérzate y sé valiente siempre porque todo lo que tu pie pise el Señor te lo dará. La promesa es: “Ningún arma forjada contra ti prosperará y callarás toda lengua que se levante contra tu vida porque te ha sido dado poder para vencer”. Actitud de Victoria, de pelea, de lucha es lo que te da el Señor en esta mañana. Aleluya. Jesús había muerto. Pedro lo había negado. Se había vuelto a la barca a pescar. Seguramente estaría pensando: “Por mi culpa se murió Jesús. Pero cuando aparece Jesús resucitado le dice: “Pedro ¿me amas?” a lo que Pedro respondió: “Señor, Tú sabes que te amo” y el Señor le dijo: “Apacienta mis corderos”.¿Qué le dijo? “Apacienta mis corderos”. Dicho de otro modo: Te quiero sirviendo de nuevo. Pedro vine a buscarte, no para reprenderte sino para ponerte de nuevo en la misión que te dí. No sos más pescador. Quiero que me sirvas, que me honres. Te quiero en el campo de batalla sirviendo otra vez” Este es el Dios que predicamos aquí en Comunidad Nueva Vida. Es el Dios que nos levanta y nos dice: ¿Estuviste apartado? Si me amás te quiero de nuevo peleando. Nunca te rindas....

5.- La actitud de la oración. Oración no es: “Oh Señor, mira este problema, mira aquel otro ...” Si sos un guerrero no vas a orar más así. ¿Sabés como vas a orar? Vas a orar cinco minutos el problema y vas a profetizar 30 minutos la solución. Tu vida es muy valiosa. Leí de un predicador que enseñaba lo siguiente: ¿Qué harías si alguien te daría $ 86.400 por día y te dice: “Si no lo invertís a la noche te lo saco. Lo perdiste”?. Y qué pasaría si cada día viniese alguien, bien temprano y te diese $ 86.400.-. Pero a la noche si no lo usas te lo quita?. Tenés 84.600 segundos preciosos por día que te son regalados por Dios. Son tu tesoro. Vos decidís en tus actitudes como usarlos. Mañana Dios te los va a dar de nuevo como cada mañana. Depende de cómo los uses te irá bien o te irá mal. Si no lo usás bíen, no te sirvieron, Si bién los usas entonces estas viviendo con la actitud correcta y serás felíz. Pensá cuantos segundos vas a usar para Dios...

Conclusión:
Tu mala manera de responder. Eso es lo primero que tenés que cambiar, tu mala actitud, actitud de indiferencia, actitud de falta de respeto, de perdón, actitud de gritos, actitud de queja, actitud de maldecir. Hoy Dios te dice: “Elegí con que actitud vivirás” ¿Sabés por qué Dios dijo esto al pueblo en Deuteronomio 30:19? Porque hay gente que aún sabiendo la verdad elige mal. Pero vos y yo somos gente de fe. Con actitud para crecer. Aleluya. Que así sea. Amén.

Oremos:

 Mensaje predicado por el Pr. Raúl Flores en Comunidad Cristiana Nueva Vida. Domingo 22 Abril 2012.

LA LEY DE LA RECIPROCIDAD

Isaias 5:1-2; 4-6 y7-b (Reina-Valera NVI)
"Mi amigo querido tenía una viña en una ladera fértil. La cavó, la limpió de piedras y la plantó con las mejores cepas. Edificó una torre en medio de ella y además preparó un lagar. Él esperaba que diera buenas uvas, pero acabó dando uvas agrias. ¿Qué más se podría hacer por mi viña que yo no lo haya hecho? Yo esperaba que diera buenas uvas; ¿por qué dio uvas agrias? Voy a decirles lo que haré con mi viña: Le quitaré su cerco, y será destruida; derribaré su muro, y será pisoteada. La dejaré desolada, y no será podada ni cultivada; le crecerán espinos y cardos. Mandaré que las nubes no lluevan sobre ella".
Vs 7b "Él (Señor) esperaba justicia, pero encontró ríos de sangre; esperaba rectitud, pero encontró gritos de angustia".

Propósito específico:

Lo que haces que le pase a otros Dios hará que te pase a tí.

Cuerpo del sermón:

Este pasaje me llevó a una conclusión práctica y funcional: Lo que haces que le pase a otros Dios hará que te pase a tí. Siempre será así. Es una ley de la retribución divina que nunca falla.

Podemos ver, que esta persona de la cual Isaías habla es Dios. Y dice que tuvo mucho cuidado de aquella viña, preparo el terreno con todo lo necesario y en sus alrededores colocó cercas para protegerla de daños (Esa viña somos nosotros) Y sin embargo no dió el fruto esperado.¿Triste no?

Meditando entonces en este pasaje de Isaías me pregunté y te pregunto: ¿De que manera retribuímos ese bien recibido de Dios?

El Señor espera que cada uno de nosotros de buenos frutos, que seamos amigables, dispuestos a brindarnos por los demás, dados al servicio, , desinteresados, ayudando a la gente hasta ver resuelto su problema, evangelizar desde el amor la entrega y el servicio. Llevando luz donde hay tinieblas, esperanza donde hay pesimismo, contentamiento donde hay tristeza, aliento donde hay disgusto, optimismo donde hay tribulación. Consuelo donde hay llanto, animación en el malhumor, oración en la depresión; pero -lamentablemente en nuestros círculos cristianos- ocurre muchas veces lo contrario.

Como dice en Isaias ...Él (Señor) esperaba justicia, pero encontró ríos de sangre; esperaba rectitud, pero encontró gritos de angustia. Dicho de otro modo y haciendo una autocrítica gastamos valioso tiempo guardando egoísmos, mezquindad, envidia, antipatía, siendo descorteses, guardando rencorres, planeando venganzas, evitando sentimientos nobles y por eso -en parte- el mundo que nos rodea grita de angustia y nosotros no conseguimos "alcanzar" el favor de Dios. Vivimos nuestras vidas con "cielos de bronce".¡Y después nos quejamos!

La propuesta de la Palabra hoy es: Siembra en tu corazon semillas de amor, paz, bondad, humildad, servicio, paciencia, gozo y fe. Jesus pudo y nosotros con El, tambien podemos. Cultivemos nuestros mejores sentimientos y cualidades y demos frutos dignos de merecer la proteccion y eterno amor de Dios a traves de Cristo Jesús. El Espíritu Santo está hoy aquí para ayudarnos. Abrámonos a Su amor.

Conclusión:

Dios es nuestro creador y cuidador El ha puesto a nuestra disposicion todo lo necesario para que estemos bien y El pone un cerco protector a nuestro alrededor y nos protege y provee a cada instante, cada dia... pero recordemos que esta bendición tiene una condición: Dar buenos frutos.

Recuerda: Lo que haces que le pase a otros Dios hará que te pase a tí.

Respetemos y seremos respetados. Amemos y seremos amados. Demos y se nos dará. ¿Necesitamos paz? Sembremos paz. ¿Queremos armonía y buen trato en la familia? Oremos. ¿Queremos una semana bendecida? Preguntemos que necesita de nosotros la Iglesia. ¿Queremos ver nuestra familia convertida? Anunciemos el Evangelio en cada oportunidad que tengamos. ¿Queremos tener sanidad en nuestro cuerpo? Visitemos los hospitales. ¿Queremos prosperar en las finanzas? Donemos comida y ropa. ¿Queremos un buen marido? Dediquemonos al servicio y la oración sin desmayar.

Oremos:

Mensaje a predicar Pr. Raúl Flores en Comunidad Cristiana Nueva Vida de Buenos Aires, Domingo 15 Abril 2012

PASCUA DE RESURRECCION: ¿EL SEPULCRO O LA VIDA?

Mateo 27:60-28:15

Propósito específico:

La piedra sellada del sepulcro nos coloca del lado de la vida o de la muerte. Que el Espíritu Santo nos enseñe y ayude a elegir bien.

Mensaje:

Dice que amanecía el domingo cuando estas mujeres que amaban tanto a Jesús fueron a visitar el sepulcro. Ese sepulcro frente al cual habían estado sentadas (Mt. 27: 61) el viernes y contemplaron la sepultura del Señor; ese sepulcro del cual se alejaron porque comenzaba el descanso sabático prescripto por la Ley . Ese sepulcro clausurado por aquella piedra que José de Arimatea hizo rodar y a la cual la inquietud de una mala conciencia mandó asegurar y sellar (Mt. 27:66). Esa piedra clausuraba definitivamente las expectativas de salvación que habían creado la vida y la predicación de Jesús. Esa piedra, asegurada, sellada y custodiada por los guardias constituía un “desmentido” a tantas promesas. Esa piedra proclamaba un fracaso contundente y esas debilitadas mujeres caminaban tristes hacia ese "monumento al fracaso".

Pero Aleluya... Dios dijo ¡Basta!, viene el terremoto y el Ángel del Señor con la fuerza relampagueante de una "verdad nueva" hace rodar la piedra en sentido inverso; se abre ese sepulcro ya vacío. Y le dice el Ángel a las mujeres: “no está aquí porque ha resucitado como lo había dicho”… entonces ellas recordaron aquella chispita de esperanza a la que no le habían dado lugar en el corazón.

De aquí en más, los seguidores de Jesús sabemos que "más allá de un sepulcro siempre hay esperanza". Lo que no pudo la piedra de nuestra autosuficiencia lo sembró el poder de Dios en la carne escarnecida y renovada de su Hijo Jesús. Habían querido “asegurar” la muerte y –sin saberlo ni creerlo- aseguraron la vida a toda la humanidad.

Se dan distintos sentimientos ante esta piedra removida.
Por un lado los guardias tiemblan de espanto y quedan “paralizados, como muertos”. Por el otro a las mujeres el anuncio del Ángel las llena de alegría y “se alejan rápidamente del sepulcro”.

A los guardias los paraliza su adhesión a la muerte; a ellas el anuncio de vida le colma la esperanza y les regala la alegría, esa alegría que las impele a salir corriendo para dar la noticia. La muerte paraliza, la vida impulsa a comunicarla.
Ellas ahora son portadoras de una gran noticia: Jesús no había mentido, estaba vivo y lo habían visto.

Los guardias, petrificados en su estrechez existencial, solo atinan andar el camino hacia la protección fugaz y coyuntural de la coima. En Mateo 28:11-15 leemos: “Mientras ellas se alejaban, algunos guardias fueron a la ciudad para contar a los sumos sacerdotes todo lo que había sucedido. Estos se reunieron con los ancianos y, de común acuerdo, dieron a los soldados una gran cantidad de dinero, con esta consigna: Digan así: sus discípulos vinieron durante la noche y robaron el cuerpo mientras dormíamos. Si el asunto llega a oídos del gobernador, nosotros nos encargaremos de apaciguarlo y de evitarles a Ustedes cualquier contratiempo". Ellos recibieron el dinero y cumplieron la consigna.

Conclusión:

Contemplando los sentimientos opuestos que tenían las mujeres y los guardias, cabe preguntarnos: ¿Qué nos atrae más: la seguridad clausurada del sepulcro o esa alegre inseguridad del anuncio?
¿Dónde está nuestro corazón: en la certeza que nos ofrecen las cosas muertas, sin futuro, o en esa alegría en esperanza de quien es portador de una noticia de vida?
¿Corremos en pos de la Vida con la promesa de hallarla en esa Galilea del encuentro o preferimos la coima existencial que nos asegura cualquier piedra que clausura y anula nuestro corazón?
¿Prefiero la tristeza o un simple contentamiento paralizante, o me animo a transitar la alegría, ese camino de alegría que nace del convencimiento de que mi Redentor vive?
Moisés, antes de morir, reunió al pueblo y les dijo: “Hoy pongo delante de ti la vida y la felicidad (o) la muerte y la desdicha” (Deut. 30:15).
Hoy también, en este Domigo Pascual junto a Jesús Resucitado, la Iglesia nos propone algo similar: O creemos en la contundencia del sepulcro clausurado por la piedra la adoptamos como forma de vida y alimentamos nuestro corazón con la tristeza, o nos animamos a recibir el anuncio del Ángel: “No está aquí, ha resucitado” y asumimos la alegría, esa “dulce y confortadora alegría de evangelizar” que nos abre el camino a proclamar que Él está vivo y nos espera, en todo momento, en la Galilea del encuentro con Dios, con el prójimo y con nosotros mismos.
Que el Espíritu Santo nos enseñe y ayude a elegir bien.
FELICES PASCUAS DE RESURRECCION!!!

Pr. Raúl Flores. Mensaje a predicar el Domingo de Pascuas en Comunidad Cristiana Nueva vida de Buenos Aires. Abril 2012

VIERNES SANTO: JESUS... LA ESCALERA DE DIOS

Juan 19:38-42

Cuenta una leyenda que Dios bajaba todos los días por una escalera para caminar y conversar con Adán y Eva por el jardín del Edén. Y el día en que desobedecieron y pecaron Dios retiró la escalera y nunca más la usó. Comenzó la vida errante y peregrina y Adán y Eva se convirtieron en los primeros emigrantes, los primeros buscadores de un sueño terrenal que nunca encontraron. Sin la escalera por la que Dios bajaba a ellos, todos sus sueños fueron estériles.

Y en aquél Viernes Santo también hubo una escalera. Dice que Nicodemo y José de Arimatea fueron los encargados de bajar, usando una escalera, el cuerpo de Jesús de la cruz para ser colocado horas mas tarde en aquél sepulcro prestado.

Y mi mensaje, hoy, quiere ser una invitación a todos los que nos sentimos cristianos a subir por esa escalera que Jesús nos pone a lo largo de nuestra vida.

La Biblia nos cuenta la historia de otra escalera, la de Jacob. Dice que Jacob huía de la ira de su hermano y una noche cansado del camino se quedó dormido y, en sueños, vio una escalera que llegaba hasta el cielo y por ella bajaban y subían los ángeles. Al final de la escalera estaba Dios. Y dice que Dios bendijo a Jacob y a todos sus descendientes.

Pero cuando llegó la plenitud de los tiempos, cuando Dios quiso que su amor por nosotros se hiciera palpable y visible, cuando Dios quiso bajar de nuevo para estar con nosotros, nos envió una escalera que une cielo y tierra. Esta escalera se llama Jesús.
Jesús, el justo, ajusticiado. Jesús, el hombre para todos, crucificado por nosotros. Jesús, el hombre que bajó por la escalera del amor para conversar con nosotros, para plantar la cruz de la salvación en el Gólgota, una cruz que llega hasta el cielo, que abre el cielo y que Dios bendice.

Dice Filipenses 2:8-9 "... y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte y muerte de cruz. Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo y le dio un nombre que es sobre todo nombre"
Este Jesús, humillado y obediente, escándalo para unos y locura para muchos, este Jesús y su cruz son, hoy, la escalera por la que nosotros estamos llamados a subir para heredar la gloria.

Este Jesús del que nosotros hacemos memoria en este Viernes Santo del año 2012 no es una reliquia del pasado. Es eterno presente, diaria presencia en medio de su pueblo

Amados, miremos a este Jesús con detenimiento. No son los clavos los que hacen que Cristo esté en la cruz clavado. Es su amor por ustedes, su amor por todos nosotros, y sólo el amor hizo que Jesús no haya bajado de la cruz aquella mañana.
Miremos al crucificado como si fuera la primera vez y decidamos, hoy, subir por la escalera de la cruz hasta los brazos del Padre.
Jesús es el final del viaje. Jesús y su cruz son Escalera y Puente para cruzar hasta la orilla de la vida sin fin que nos espera...

Miremos al que traspasamos, es Jesús. Y Jesús no tiene doble. Es El. No hay otro. No hay otra cruz, otra escalera, otro amor que pueda salvar.
Y en este Viernes Santo nosotros miramos y miramos pero sobre todo le pedimos que nos mire él, que nos ame él, que nos ayude con su gracia a poner nuestros pies en el primer escalón que sube hasta su corazón y quedarnos allí.
Por esta escalera José de Arimatea, Nicodemo y otros amigos bajarán a Jesús de su cruz y lo pondrán en brazos de María ,su madre para llevarlo finalmente a aquel sepulcro prestado.

Conclusión:

Jesús es la única escalera a subir pero ¿quién nos enseñará a subir por ella? ¿Quién nos dará el valor para vencer el vértigo de la altura? ¿Quién nos acompañará en esta ascensión? ¿Quién fortalecerá las rodillas vacilantes? ¿Quién señalará los peldaños más eficaces?
¿Quién? La iglesia, nosotros, comunión de hermanos que recordamos hoy y siempre que Jesús es la escalera que nos lleva hasta el Padre.
¿Quién? La iglesia, que a través de los símbolos del pan y la copa nos libera del peso de la culpa y nos devuelve la alegría de la salvación.
¿Quién? La iglesia, que nos recuerda que para subir esta escalera no hay que llevar ningún peso, sólo el peso de un gran amor a Jesús y a los hermanos es la carga que podemos llevar en la espalda.
Felices Pascuas para todos.

Mensaje a predicar Pr. Raúl Flores en Comunidad Nueva Vida de

SEMANA DE LA PASIÓN: ELEGIMOS AMAR...

Texto: Marcos 11:1-11

Propósito específico:

El amor no es un sentimiento, es una decisión, una elección.

Mensaje:

Hoy, Domingo de Ramos entramos en la Semana Santa, ese tiempo especialísimo de contemplación de los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús. Y sin duda debemos verlos como los días más apropiados para meditar esos misterios tan importantes de nuestra fe. Quiera el Espíritu Santo que podamos conmovernos por los sufrimientos del Señor y llegar así a una conversión de fondo, al arrepentimiento verdadero y confesar nuestros pecados. Es una oportunidad hermosa para poder enrumbarnos mejor en el camino de la salvación.
Insisto: Hoy celebramos la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén. Se llama también este domingo, Domingo de Pasión, pues en este día damos inicio a la Semana de la Pasión del Señor.
Dice nuestro texto que entre gritos y silencios, Jesús el hombre más libre del mundo, entra en Jerusalén.
El amor no es un sentimiento, es una decisión, una elección.
La gente suele decir hay cosas que simplemente suceden: una traición, un ataque de corazón, un embarazo juvenil, la muerte… Y yo digo que todo eso no sucede porque sí, mas bien es consecuencia de decisiones que tomamos.
Jesús tomó decisiones auténticas y también... sus discípulos, Judas incluido.
Decimos que Jesús tenía que morir, que su muerte fue un acto del destino. No. Falso.
Jesús decidió predicar y vivir de una manera peligrosa, eligió el amor a nosotros, decidió amarnos a todos y esta decisión le llevó a la muerte.
Judas hizo una elección humana al traicionar a su Maestro. Y podía tener mil razones para justificar su decisión. Pedro decidió negar al Señor, una decisión humana muy calculada y razonada. Poncio Pilato tuvo que tomar también su decisión. Y firmó la sentencia de muerte.
Usted y yo hacemos elecciones todos los días. Nuestras elecciones y decisiones pueden apagar el Espíritu o encenderlo más... Separarnos del amor de Jesús o acercarlo más... Destruir el amor de nuestros padres y hermanos o construir una relación más fuerte y sólida.
Si nosotros como Comunidad Nueva Vida queremos vivir construyendo, en un ambiente de paz, armonía, respeto, sinceridad, responsabilidad, entonces tenemos que elegir el amor, aún sabiendo que corremos el riesgo del sufrimiento y de la muerte.
Dice que los soldados lo miraban, mientras jugaban a los dados.
Jesús era también un jugador. Se jugó la vida. Hizo su sacrificio y murió en la cruz para liberar al mundo de Dios del pecado.

Conclusión:

Esta Semana Santa estamos invitados a tomar parte en el drama de Jesús, nuestro drama; no somos ni espectadores ni turistas, con Jesús somos los protagonistas de la historia de la salvación.
Celebramos nuestra vida, nuestra muerte y nuestra resurrección para vivir de aquí en adelante construyendo -en nuestro metro cuadrado- un mundo de amor y servicio a todos por igual imitando así a nuestro Maestro y Señor. Que así sea...
Oremos.
Mensaje predicado por el Pr. Raúl Flores en Comunidad Cristiana Nueva Vida de Buenos Aires, Domingo de Ramos 01 Abril 2012