OJOS DE AGUILA...

Numeros 13:27-33

Propósito específico:

Hay dos pensamientos que me gustan mucho y que llegaron a ser (sin saberlo, claro) los que Caleb supo aplicar a su vida: "Que el árbol nunca te tape el bosque" y "Dime donde miras y te diré hasta donde llegarás". Caleb nunca miró "donde estaba" sino miraba "hasta donde podía llegar". Para nosotros sería algo así como: "Dejemos de ver donde estamos y comencemos a ver a donde podemos llegar".

Estudiando un poco la vida de Caleb llegué a la conclusión de que el secreto del éxito en su vida tenía que ver con su carácter. De la tribu de Judá, Caleb nunca dejó que sus circunstancias lo controlaran, lo paralizaran... Caleb no tenía el hábito de mirar donde estaba sino de ver a donde podía llegar.
La Buiblia lo destaca como un hombre de fe... Caleb podía ver que detrás de cada prueba Dios tenía preparada una salida hacia algo mejor.
Caleb se propuso una meta en la vida: Entrar a la tierra prometida, poseerla y disfrutarla. Nunca miró donde estaba sino a donde quería llegar y lo logró.

Identifiquemos 4 rasgos de su carácter:

1.- LE CREYO A DIOS (Numeros 14:24) Dios mismo testificaría de ello.


2.- SE APOYABA EN DIOS. (Num 14:9) "... Y con nosotros está Jehova)


3.- TRABAJO PARA SU FUTURO. (Num 13:25)


4.- CREYO QUE SU DESTINO ESTABA LIGADO AL TRIUNFO (VS30)

Conclusión: Dios te necesita, tu familia te necesita, tus venos te necesitan, tu Iglesia te necesita, tu nación te necesita. Que ojos de águlia te sean dados... Los necesitás...